LOS HACEN CORRER DESNUDOS Y AMARRADOS POR ROBAR EN COLA DE GASOLINA

Tras pasar horas e incluso días varados en una cola para recargar gasolina en distintos puntos del país, los venezolanos también se encuentran a merced del hampa desbordada que intenta extraer beneficio de lo poco que ya poseen los pobres ciudadanos. Sin piedad alguna los maleantes pretenden arrebatar lo mínimo de lo que queda. Pero a veces los papeles se revierten: el victimario pasa a ser víctima, solo que en ese caso no llama a misericordia. Y ese ya es un asunto digno de ser estudiado por la Psicología.

Esta mañana en Caracas, tres jóvenes que se encuentran haciendo ya sus pinitos en el campo del hampa caraqueña fueron detenidos por los propios ciudadanos cuando intentaban robar a los torturados conductores que aguardaban pacientemente para echar gasolina en una bomba de El Llanito; los ladrones posteriormente fueron amarrados y desnudados, y obligados a correr, todo en aras de propinarles una lección…

Desnudos, con las manos atadas y cartones para taparse. Así corrieron tres jóvenes por la avenida Tamanaco, en la urbanización El Llanito, en Caracas, luego de haber estado robando en una cola por gasolina.

Los reportes en las redes sociales señalan que un grupo de personas logró capturar a los sujetos, presuntamente menores de edad, los despojaron de la ropa y los ataron.

En videos difundidos se observa que varios motorizados persiguieron a los jóvenes por la vía. “Corre, corre, corre. ¿Te gusta robar a la gente de barrio?”, expresó uno de los hombres. También aparece el momento en el que otro, desde su moto, intenta darle una patada a uno de los sospechosos.

En las colas por gasolina del país, ciudadanos han denunciado que han sufrido robos mientras esperan, en medio de largas horas, por el suministro en las estaciones de servicio.

Algunos de los comentarios en Twitter fueron: “Salieron barato”, “Bien bueno”, “Ni así aprenden”, “Mañana van y roban otra vez, esa no era la solución”, “Las autoridades brillan por su ausencia, esa es la Venezuela en la que vivimos“.